El amanzaburros: Yo, supersticioso.

¡¡¡No mames un gato negro!!! ¡¡¡Rompiste el espejo, ya valiste madre!!! ¡¡¡No tires la sal es mala suerte!!!

Nunca se han preguntado ¿¿Porqué exactamente la gente considera que da mala suerte lo anterior?? Se acabaron las dudas, desde las profundidades del conocimiento y desde los más hondos mares de la sabiduría llega la sección del blog que se encarga de aniquilar la ignorancia y exterminar el pendejismo.

Este es un especial de las supersticiones. Qué son, cuáles son, cuál es su origen. Realmente una superstición no es más que una creencia común y cotidiana que la gente hace costumbre y tradición. Es una creencia que afirma que es posible alterar un destino, ya sea para bien o para mal, siempre interviniendo la suerte (sea buena o mala también). Desde luego, no existe un fundamento ni prueba de que la superstición en verdad pueda alterar algo en nuestra vida, pero lo interesante aquí es ver porqué surgen estas creencias que hasta cierto punto (sino es que completamente) resultan absurdas o mamonas. Veamos las más populares y porqué surgen:

• Abrir un paraguas dentro de la casa. Se considera mala suerte. El origen de esta creencia es porque en el S. XVII en europa la gente consideraba un insulto abrir un paraguas cuando no llovía porque según estabas negando la protección de los dioses al esconderte de ellos.
• Romper un espejo. Es muy popular, 7 años de mala suerte si le partes la madre a tu espejo. En la época del caldo la gente consideraba a los espejos como un reflejo del alma, romperlo significaba por lo tanto perjudicarla.
  
• Los gatos negros. Otro típico. En épocas de Europa Medieval, cuando todo el mundo creía en las brujas; existía la idea de que éstas se transformaban en gatos negros para esconderse de quienes las cazaban. Con el tiempo los gatos negros se convirtieron en símbolo de brujería y hechicería.
• El trébol de 4 hojas. Es señal de buena suerte. Los cristianos del medievo consideraban que era una especie de reproducción de la cruz de cristo. Recuerdo que una amiga de mi mamá tenía un jardín de tréboles y ahí voy de pendejo a buscar el de 4 hojas...
• Herradura en la puerta. Son de buena suerte. Los griegos consideraban al hierro un metal mágico que ahullentaba malos espíritus y demonios. La forma de media luna significa fertilidad y fortuna. ¡Y nosotros de pendejos poniéndoselas en las patas a los caballos!
• Caminar bajo una escalera. En el S. XV en Francia los futuros condenados a muerte en la guillotina eran obligados a pasar bajo una escalera. Ups!
• Tirar la sal. Durante siglos fue el condimento más preciado (bueno, lo sigue siendo), por lo tanto derramarla era considerado un insulto y de paso el desencadenamiento de una serie de cosas terribles...

Lo interesante de estas creencias es cómo se han ido propagando con el paso del tiempo a pesar de 1) Ser muy antiguas, con casi 6 siglos atrás y 2) No son ni siquiera de nuestro continente. Las supersticiones han ido perdiendo fuerza en las últimas décadas. Menos mal que cada día más personas deciden construir su suerte ellas mismas... porque de que existe la suerte existe.